Llovió en toda la Región. El primer día del temido y anunciado temporal obligó a utilizar el paraguas desde Caravaca, en el Noroeste, al Mar Menor, pasando por Murcia, toda la costa y el Altiplano. Eso sí, las precipitaciones cayeron con desigual intensidad. En Cartagena se recogieron 71,3 litros por metro cuadrado, según los datos recogidos por el Centro Meteorológico de Guadalupe. En algunos puntos cercanos a la ciudad, sin embargo, cayó todavía más. Así, la Confederación Hidrográfica del Segura llegó a registrar 88,4 litros por metro cuadrado en la rambla de Benipila. También llovió abundantemente en el Guadalentín. De hecho, el temporal hizo acto de presencia ya durante la noche del miércoles al jueves en Puerto Lumbreras, donde dejó 45,2 litros en sólo una hora. Fue un anuncio de lo que vendría a partir de primera hora de la mañana, cuando las precipitaciones afectaban ya a prácticamente toda la Región. Ya por la tarde, las lluvias volvieron a arreciar en algunos puntos, como en la ciudad de Murcia. Meteorología mantiene la alerta naranja por riesgo importante de tormentas durante la jornada de hoy y mañana. Hay posibilidades, aunque bajas (de entre un 10 y un 40%) de que en Lorca se alcancen los 150 litros, advirtió ayer el director general de Protección Civil, Luis Gestoso. En la ciudad de Murcia cayeron ayer 22,4 litros por metro cuadrado, según el Centro Meteorológico de Guadalupe. De nuevo, la capital volvió a anegarse y las calles y carriles de la huerta fueron un auténtico charco por donde circular se hizo muy complicado. Varias aulas de Infantil del colegio público Ángel Zapata se inundaron. «Hemos estado toda la mañana guardando libros en plásticos para evitar que se dañen», explicaba un grupo de madres. Los baños del centro estaban anegados, y también algunos pasillos. «Si sigue lloviendo, no creo que mañana [por hoy] se pueda dar clase en el centro», advertían. Los bomberos tuvieron que achicar agua en tres bajos de la ciudad y en otros seis en Cartagena. En toda la Región hubo 22 salidas por este problema. Sin embargo, no hubo que lamentar incidentes graves.
Un catamarán a la deriva
El Mar Menor también se vio especialmente afectado. En San Javier cayeron 33 litros por metro cuadrado, y los socorristas tuvieron que auxiliar a un catamarán que quedó a la deriva en el Mediterráneo por culpa del temporal, y que terminó siendo arrastrado hasta la playa del Arenal, en La Manga, por el viento. Los ocupantes, una pareja extranjera, fueron rescatados sanos y salvos. lEn Lorca, Protección Civil y efectivos de la Policía Local vigilaron durante toda la jornada la zona de Los Curas y Las Librilleras, en la pedanía de Ramonete. Preocupaba la posibilidad de que el cauce de la rambla creciese y los vecinos de varias viviendas tuviesen que ser desalojados, como ya ocurrió hace varios días. La lluvia caída durante la noche del miércoles al jueves provocó el desbordamiento de la rambla de La Galera, en la pedanía de La Escucha, lo que provocó inundaciones de garajes y de algunas casas de planta baja en una urbanización.lEn Puerto Lumbreras, y tras la tromba de la noche del miércoles al jueves, se vigila especialmente el paso sobre la rambla de Nogalte. El Ayuntamiento envió 3.000 mensajes de móvil anunciando las previsiones de fuertes tormentas.
